Roscón de reyes personalizado

Todas las navidades solemos reunirnos los amiguetes para hacer una cena de hermandad; la de este año coincidió con la noche del roscón de reyes, así que decidí llevar un postre especial. Dicho postre no era, ni más ni menos, que un roscón con regalitos personalizados, pequeños muñequitos que eran avatares de cada uno de los amigos que pudieron asistir a la cena (hubo muchas bajas entre las obligadas cabalgatas con los niños, alguno que andaba por la nieve, otro por los aires, algún enfermo...).

El rato que invertí en componer y cuadrar los muñequitos, diseñar y pegar las pegatinas, etc, creo que tuvo su recompensa, todos salimos contentos de la cena y, además, con una anécdota graciosa para recordar ;) Al fin y al cabo, sólo se trata de pasar un buen rato con los amigos.

EMILIO CON SU AVATAR DE RECIÉN CASADO.

JAVIER Y SU MUÑEQUITO DE ARQUITECTOS SIN FRONTERAS.